Googlemanía y Geopolítica

Es curiosa la sensación de observar los acontecimientos de los últimos días. Y en especial aquellos que acontecen en las redes sociales, especialmente Twitter, por ser la más inmediata y la que sirve de «termómetro» ciudadano, sobre el interés de las cosas que nos rodean; eso que los twitters adictos llamamos trending topic, y que los medios de comunicación han acogido con la fe de los conversos.

En este mes de julio, hemos asistido al nacimiento de la penúltima red social, con gran eco, tanto en los early adopters, como en los medios: se trata de Google+, el enésimo intento de Google de dar un «zarpazo» al pastel que casi se come en solitario Facebook. La cuestión es que en 24 días ha conseguido 20 millones de usuarios, algo que asombra a más de uno, pero que a mi me deja frío, no en vano, la inmensa mayoría de usuarios de internet, somos usuarios de alguna de las herramientas de la «cloud» de Google, y además hay una gran cantidad de nosotros (millones) deseosos de probar nuevas herramientas. La novedad y el interés por descubrir algo nuevo, es consustancial a la naturaleza humana.

Pero lo que me asombra, son los ríos de tinta digital sobre la nueva red (una pifia, según mi juicio, aburrida y fea como casi todo lo de Google, ya saben prima la funcionalidad sobre la estética, de esto podrían haber aprendido algo de lo que hace Apple desde hace décadas), y sobre como ésta sustituirá a Facebook, o a Twitter, o a lo que sea. Estamos ante una de las mejores campañas de branding corporativo que jamás he visto, y todo para recapitalizar el valor de la compañía, en un momento en el que planea sus próximos movimientos para que su valor en la bolsa neoyorquina, tras cinco años, vea como se dispara.

Esto y no la idea de ser la alternativa a Facebook es lo que interesa a Google. Es difícil creer que la inmensa mayoría de usuarios de Facebook (cerca de 700 millones) realicen la gran migración. A Google le vale con los usuarios más activos, que permitan gran cantidad de conversaciones, y por ende de acciones virales. Es curioso ver como más de uno ha abrazado la nueva red, diciendo que se olvida de las demás.

Craso error, internet es una red líquida, sin fronteras claras, y por lo tanto muy difusas, por lo que la interacción en más de un medio, red social y herramientas son más que necesarias, no solo a efectos de uso individual, corporativo o de ocio, sino para acciones de branding.

Pero lo que más me impresiona, de esta acción de mercadotecnia de la versión más actualizada del Gran Hermano, es su capacidad para fagocitar todo tipo de debates, en las áreas más activas de la red.

En un mes de julio, que a su fin está viendo la posibilidad de entrar en «default» a la economía más grande del planeta, dado el extremismo de los fieles del Tea Party que intoxican las filas del GOP, y que persiguen más la caída de Obama, que solucionar los problemas de sus conciudadanos; el enésimo ataque de los mercados al Euro, y la antieuropea visión del mayor cáncer que Europa ha tenido desde su fundación: la Sra. Merkel; o ya hablando de extremismos, el salvaje y cruel atentado de Noruega, que nos ha recordado que el huevo de la serpiente sigue horadando nuestro sistema (mientras veíamos solo enemigos en otro escenario, fruto de una acción de distracción muy bien elaborada), dado que la visión geopolítica únicamente válida ha sido la de la «guerra contra el terror», un invento de ese chiste político (sin gracia) llamado George Bush Jr. que originó la mayor cruzada contra los derechos ciudadanos del mundo (mientras de paso ayudaba a desrregular más aún sus mercados internos y de aquellos polvos estos lodos); mientras que nos olvidamos de que el terror surge de las esquinas más insospechadas de nuestros vecindarios.

Nos hemos olvidado completamente que la sociedad somos todos. No vale con votar una vez cada 4 años, la democracia es un organismo vivo que se alimenta de cada uno de nosotros. No podemos hacer dejadez de nuestras funciones individuales como miembros de la sociedad. El movimiento 15M es un síntoma de ese malestar, de a quienes se les olvidó nuestra obligación democrática de hacer más transparentes y justas a nuestras sociedades.

Hemos asistido paulatinamente, en medio de una sociedad narcotizada por el dinero y la falsa apariencia de seguridad, a una merma de nuestros derechos ciudadanos, no por mor de los estados, sino de los mercados. Son estos los que controlan a los estados y no a la inversa. Por ello necesitamos a los estados más que nunca, por ello necesitamos a la Unión Europea más que nunca. Hacen falta instituciones que puedan jugar como un «global player» para poner coto a los desmanes del mercado. Hemos de reinventar un capitalismo que sea social, que permita el progreso y la innovación, pero que no sea a costa de los más débiles del sistema, porque eso lo que hace es agrandar el huevo de la serpiente y la sensación de insatisfacción social.

Si la acción de los mercados es ya una cuestión geopolítica, no es menos cierto que la acción de los ciudadanos ha de constituirse así, a escala global. Las redes sociales dentro de esa red líquida en la que nos relacionamos lo permiten, pero sin olvidarnos de lo importante: Revitalizar y reinventar nuestras democracias, que no es otra cosa que reforzar nuestros gobiernos y relegitimarlos frente a los mercados.

Epílogo: Durante el fin de semana pasado, vimos como de los mensajes de asombro, solidaridad con las víctimas y repugnancia contra la violencia, por los crímenes de Oslo y Utoya, se pasó a hablar de la muerte de la cantante Amy Winehouse, como un hecho trágico de dimensiones globales (sin duda la pérdida de un ser humano lo es, pero la comparación de un hecho con otro no resiste refutación alguna por el segundo). Toda la red se volcó con este tema. Somos dóciles y fáciles, y los mercados, y quienes los controlan, lo saben. Somos muy fáciles de manejar y, lo peor, no sabemos cómo actuar como ciudadanía organizada para cambiar el mensaje y las acciones de los gobiernos.

Esa es la red social que queda por inventar: La que determine acciones democráticas ciudadanas a escala global, el paso de la red líquida a la red geopolítica, pero desde una perspectiva ciudadana.

¿Paradojas del escenario internacional?

A menudo en mis conferencias recalco dos cuestiones. Primera: estamos viviendo un cambio de épocay no una época de cambios. Y, segunda: de la misma forma que el siglo XX terminó en 1989 con la Caída del Muro, el XXI no ha comenzado a dar sus primeros pasos hasta ahora.

Este casi cuarto de siglo intermedio ha sido la barrera difusa de transición entre un siglo y otro. La barbaridad del 11-S, así como los atentados de Londres y Madrid, por parte del extremismo islámico alienante, fueron un intento de desestabilizar los rescoldos del hundimiento del sistema bipolar en el que vivimos, desde algo más tarde del término de la Segunda Guerra Mundial (Período que también vivió sus límites difusos).

Asistimos perplejos y contrariados a lo que ocurre en el sur del Mediterráneo y en Oriente Medio. Esa perplejidad deriva, de que nadie podía prever lo que está ocurriendo. No se hablaba de ello, pero era un territorio común de las democracias occidentales, que era mejor un dictador proocidental en esos territorios, que una futura región democrática en manos de quién sabe. La visión eurocéntrica de la democracia y militarista de dominio por parte de los EE.UU., nos hacía creer en un espacio de «seguridad» a costa del sufrimiento de las poblaciones de esos países.

Otro territorio común, ha sido el de imponer la tesis oficial, con el beneplácito de los medios de comunicación de todo el orbe occidental, de que estas poblaciones serían pasto de los radicales islámicos, si no existiera un férreo, antidemocrático y antisocial control de las mismas.

Nada más lejos de la realidad. El extremismo de Bin Laden y talibanes, está más que en entredicho. La prueba palpable la vimos el año pasado en Irán, con la «revolución verde» en la que la gente se echó a la calle para protestar por el resultado de las elecciones y de paso por el régimen de los Ayatolahs. Fue un primer aviso. Como en cualquier sociedad, sólo los radicales son una minoría. Vivimos en una sociedad hiperconectada, que conecta y comunica a sociedades dispares a la vez, tejiendo espacios comunes al mismo tiempo, y el mundo islámico no es una excepción. Sí, querido lector el mundo islámico, sin ningún tipo de miedo. O, acaso da miedo decir la Europa o la Norte América cristiana, ¿no?, ¿verdad?

Pues es solo eso, hay que aceptar la dimensión cultural y social del Islam, como un conjunto de relaciones antropológicas que tienen varias lecturas. No todo el mundo acepta la Sharia, y por supuesto esta tiene varias lecturas, según que tipo de escuela religiosa siga quien la interprete (Acaso no pasa esto mismo en el cristianismo o en el judaísmo). Aclarada esta cuestión, la de desrradicalizar el concepto de islamismo, procedo con lo que realmente quiero escribir en este post.

La cuestión, es que Túnez, el germen de las revueltas no deja de ser un aviso de que las sociedades quieren ser democráticas y quieren escribir su propio destino. Acaso es lógico, que la juventud de estos países vea como se desangran los mismos, viendo como emigran hacia Europa sus gentes por no tener ninguna oportunidad para superar en conjunto los objetivos de convivencia y crecimiento de sus respectivas naciones. No es acaso, este principio extrapolable a Egipto, Libia, Argelia o Bahrein.

Dicho esto, no es acaso normal, que los iraníes vuelvan a la calle para exigir lo mismo que hace un año: democracia, tolerancia y respeto a los que disienten y piensan de otra forma. Es acaso esto inasumible. La respuesta es clara: No.

Pero es que desarrollar nuevas políticas, para nuevos tiempos es un reto a la altura de muy pocos estadistas a nivel mundial. Por desgracia, carecemos de liderazgos de verdad en Europa, y por desgracia utilizamos las «armas» democráticas del Tratado de Lisboa de forma ineficiente. Por no decir, que no las utilizamos. Lean si quieren la Nota de Prensa emitida por el Gabinete de la inane Señora Ashton en el día de ayer.

Además, tanto EE.UU. como Europa han de estar preparadas para echar una mano a los gobiernos de transición, y lo que es más importante a los gobiernos que salgan de las urnas en los comicios que tengan lugar en los próximos meses. Pero la realidad es que la mayoría de las cancillerías solo estaban preocupadas por tener «contentos» a los siniestros jefes de estos regímenes, para garantizarse en primer lugar sus reservas de crudo y gas natural y en segundo lugar para garantizar una línea de defensa, contra el islamismo radical en sus propios territorios. Teniendo en cuenta, obviamente, el castillo de prebendas que ello exige para mantener «engrasados» estos sistemas. Por no hablar también, de los pingües beneficios de la industria armamentística a través de los traficantes de armas y las continúas violaciones de los principios de la claúsula del tercer país en la compraventa de armamento.

La cuestión es que en Túnez, se han puesto los cimientos para comenzar a construir una futura sociedad democrática, donde el islam tiene mucho que decir y reinventar. Pero debemos comenzar a encajar una visión poliédrica del mismo, con varias aristas y caras, y en las que tenemos que ayudarle a construir una cosmovisión de libertades y garantías comúnmente aceptadas en el planeta. Tenemos un espejo donde mirar. Se trata de Turquía, y el partido gobernante. En Europa o EE.UU. vemos normal que las diferentes comunidades cristianas, con la todopoderosa Iglesia Católica al frente, se inmiscuyan en la vida política, y en muchas ocasiones tensionando, desde una perspectiva político-religiosa a toda la sociedad. Y ello, es aceptado como normal. Esto ocurre en Turquía también, pero la sociedad turca tiene resortes garantistas, con sus tensiones, para que la cuerda no se rompa.

Todos los países han de tener su oportunidad de construir sus espacios de convivencia de acuerdo a su cosmovisión, que desde luego ha de ser aceptada a los lugares comunes de las democracias de todo el planeta. Y este es nuestro principal reto.

Recordemos, que la estrategia de Bin Laden y sus secuaces, era la de empujar a las poblaciones de los territorios islámicos a la jihad como única revolución contra los dictadores proocidentales. Esa idea, ha perdido toda la legitimidad en menos de un mes. El grueso de la población de Túnez y Egipto y el resto, tan sólo quieren su revolución personal, para construir una sociedad en la que poder avanzar y tener una oportunidad, construyendo espacios de libertad.

Es tan clara esta visión, que hasta Ahmadineyad realizó una declaración ayer bajo una hipocresía deleznable, criticando la actitud de Gadafi al bombardear a su pueblo. Precisamente él, que no tiene ningún problema para utilizar a la Guardia Revolucionaria iraní para masacrar a su pueblo, por no hablar de un sistema judicial no garantista que condena a muerte a quien se le antoja. Además en Libia queda todo por reinventar, toda vez que ha quedado demostrado que la «gran esperanza blanca» para occidente, su hijo Saif el Islam podría ser la solución de transición. Por desgracia, el hijo de Gadafi, es otro aspirante a sátrapa más.

Otro problema en la ecuación. El régimen de Bahrein (tradicional amigo de EE.UU. en la zona), régimen que está apoyado en una familia suní, frente a la gran mayoría de la población que es chií, de ahí la necesidad de traer mercenarios al país, que son fieles a la familia real, y que a cambio obtendrán compensaciones económicas, y lo que es más importante la nacionalidad para invertir la composición religioso demográfica del país. En las últimas horas, parece que ha aflojado la cuerda, con la liberación de líderes religiosos chiís.

En el día de hoy, Gadafi ha perdido el control del país, algunas agencias internacionales dicen que tan sólo controla el sur de Trípoli y que ciudades como Tobruk o Bengasi están bajo el control de los opositores. Opositores que según algunas agencias, pretenden incendiar los oleoductos (algo que es un sinsentido, ya que su balanza de pagos depende de la exportación de crudo y gas), y ya no sabemos si esto es información interesada o contrainformación de otro tipo de «agencias». Aunque otras informan de que son órdenes explícitas de Gadafi, para aumentar el desasosiego de la población. Una vez más, la verdad es el rehén de los conflictos.

Recordemos que esas otras «agencias» han estado detrás de todas las dictaduras que controlan materias primas en toda África, investiguen un poco sobre Nigeria y entenderéis de que hablo.

De todas formas, me preocupa la NO voz de Europa en estos momentos. El Consejo y el Presidente de la UE deberían hacer un claro llamamiento a las poblaciones de estos países de que Europa va a estar con ellos para construir el futuro de sus naciones. Pero lo que transmitimos es que nos preocupa tan sólo lo que va a pasar con la ola de inmigración que se nos puede venir encima. Una cosa es preparar planes ante tal eventualidad, pero otra cosa es que esta cuestión marque la prioridad de la agenda política.

Una vez más, Europa es rehén de las miradas cortoplacistas de nuestros líderes, y no saber estar a la altura de las circunstancias. Me queda tan solo la esperanza de que el Parlamento Europeo sepa, por lo menos alzar la voz, para exigir acción no a la Comisión pero si al Consejo.

Recordad, estamos escribiendo las primeras páginas del futuro de nuestros vecinos y con nuestros vecinos. Y esto parece que nadie lo tiene en cuenta. Seguiremos expectantes.

P.D: Por cierto, los «de siempre» han aprovechado la incertidumbre, no para exhortar a las poblaciones a mantener actitudes democráticas y construir instituciones de esta corte. Para qué, es más fácil convivir en el caos y establecer líneas de defensa mediante el ataque. Adivinen que ha pasado en las últimas horas en Gaza.

Una rápida impresión sobre el #manifiesto

Todavía no ha terminado el debate entre la Ministra de Cultura, la señora Sinde, y un colectivo de blogueros y 4154622625_b952a76b14especialistas en lo que llamamos órbita 2.0; pero hay una cuestión ineludible: sobre las 11:30 horas la Ministra se ha retirado de la reunión para asistir a la inauguración de un Museo.

Me imagino que para la Sra. Sinde no ha debido de ser un plato de buen gusto tener que tratar con una pequeña representación de la más amplia comunidad que representaban en ese momento, a tenor de un movimiento emergente en la red en las últimas 48 horas. Por cierto un colectivo, que sin pretender serlo, representa a muchos más y es más plural y tiene una más sólida base social, que ese otro colectivo del «logotipo rojo».

Y es que cuando se confunden los objetivos públicos con los medios, este es el desastre que se origina. El empecinamiento en querer hacer ver una «realidad» que no se refleja con la verdadera realidad ciudadana, ni siquiera con el actual debate que emerge en los colectivos profesionales de gestión cultural de este país, es una ola que lleva a la frustración y a los cuarteles de «invierno» de determinados oligarcas y «vociferantes» del decimonónico siglo XX en lo que a TIC y actitudes ciudadanas se refiere.

La cuestión es que algo ya ha cambiado, a pesar de la cantidad de «egos» heridos y humillados que hemos visto en el hash tag de #manifiesto en Twitter.

Ese cambio es la posibilidad que tenemos la ciudadanía de poder incitar al debate, a la incorporación de la agenda pública de iniciativas ciudadanas, mediante herramientas colaborativas 2.0 y por supuesto la posibilidad «real» de intervenir en el debate público.

Estoy acostumbrado, a oír hablar de oGov por parte de nuestros representantes públicos y en esta primera gran ocasión, el Gobierno que tenía una gran oportunidad de poder visualizar un nuevo contexto comunicativo y social, la desaprovecha. Estoy más que convencido, que eso se debe a que desde el gabinete de comunicación del Ministerio de Cultura se le ha restado importancia, pero la verdad es que es una pena. Esperaba que en Cultura por lo menos fueran más sensibles al cambio.

Espero que desde Moncloa vean el gran potencial que esto supone como herramienta de información social (me consta que en otros ministerios ya ven esto como un potencial y no una amenaza, y están trabajando en medidas al respecto, ya iremos viendo resultados a lo largo de 2010), y no traten de eclipsarlo como la supuesta «amenaza» que algunos creerán ver. (Especialmente en los entornos de los gabinetes de comunicación).

Está claro que el hecho de «twittear» en directo una reunión con representantes institucionales a todo el mundo, sin interferencias, sin ser «cocinadas» en una posterior intervención o «comparecencia» conjunta, va a cambiar sin duda la percepción de la información y la realidad informativa. Y esto es una buena noticia.

Finalmente, tendremos que comenzar a debatir sobre nuevos sistemas de representación ante intereses colectivos, a través de las redes sociales y herramientas colaborativas que ya son de pleno dominio y uso ciudadano, dentro de la clou computing. Y este es el verdadero reto de la eParticipación y oGov para que en el futuro sean usados de forma plena y transparente para la sociedad.

Espero vuestras opiniones…

PD: Sobre las 11:54 todo parece que va mal y que las posturas del Ministerio de Cultura no son conciliadoras. Informaré más pausadamente cuando tenga más material y se pueda reflexionar sobre él.

50 años de fascismo y terror en Euskadi. Último Acto: El estertor

El pueblo vasco (y el resto de España, hoy somos todos un poco vascos) tiene que desayunarse hoy con la etaezefeméride más oprobiosa que jamás ha tenido en su historia: la creación del único grupo mafioso de Europa que sigue vendiendo ideales políticos, donde tan sólo cabe odio y «negocio».

ETA ha vuelto a teñir de rojo luto, las vidas de los familiares y amigos de los dos jóvenes guardias civiles asesinados vilmente en Calviá, el 30 de julio. Pudo ser mucho peor, pero lo hecho, ya es en sí de lo peor que han realizado desde el atentado de la T4 de Barajas; por no decir en lo que se pudo convertir el atentado frustrado el día anterior en Burgos, cuando hicieron detonar una furgoneta «clonada» de un vecino cargada con 200 kilos de explosivos.

Dicho esto, sólo queda esperar que las fuerzas de seguridad del estado, hagan su trabajo (con el nivel de calidad y exigencia con el que lo llevan desempleñando en los últimos años) y atrapen a los cobardes hijos de puta que disimulados entre la multitud, han realizado tamaña salvajada contra el sentido común, la democracia y los derechos de los ciudadanos.

Acaso no saben los hijos de puta de la pandilla (ya no son ni siquiera banda, se mean encima cuando les atrapa la policía) de asesinos, que la sociedad vasca y la española ya le hemos vencido, que ya no tienen cabida en el seno de nuestras instituciones democráticas, que son la otra cara del espejo del otro fascista con el que nacieron; y que por lo tanto ya no tienen derecho a existir, ya que su existencia lo que hace es ahogar el resurgir social del pueblo vasco en el contexto español y europeo. ¡Tan ciegos están!

Mi ánimo y solidaridad para las fuerzas de seguridad del estado y sus familiares. Hoy no va a ser un buen día para ellos, máxime cuando escribo estas líneas con temor a que tenga que hacer una extensión de las mismas al final del día. Si la banda de hijos de puta han hecho lo que han hecho en los dos últimos días, no quiero pensar en lo que hayan podido planear para hoy.

Y digo esto porque esta mañana he quedado estupefacto al oír en la radio estupideces del tipo de como la Guardia Civil o la Policía Nacional no habían previsto algo de esto. Esos comentarios dignos de estupidez y estulticia humana, sólo reflejan una vez más las ganas de hacer política con el terrorismo. Estoy convencido de la profesionalidad y compromiso de las fuerzas de seguridad del Estado para derrotar a ETA (les va la vida en ello). Poner en cuestión su «descuido» ante los atentados de Burgos y Calviá, dada la cercanía de las fechas del aniversario y las ganas de hacer daño de la alimaña etarra, es no sólo una cuestión de bajeza moral y poca talla política; peor aún, es crear un estado de pánico innecesario, dado que con un poquito de sentido común podemos deducir que todos podemos ser objetivo de cualquier asesino, por mucha protección que haya, siempre habrá eslabones débiles en la cadena: es por ello por lo que estas acciones se llaman terroristas (provienen de la sensación de terror que infunden, de ser una amenana invisible y presente).

Pero no, no nos van a doblegar. Su final está cerca porque estamos todos unidos ante la única salida posible: la rendición incondicional porque el Estado de Derecho es más grande, porque la sociedad puede con estas oscuras sombras del pasado, que nos quieren hacer ver otra realidad imaginada, fruto de la pesadilla esquizofrénica en la que viven. Somos más fuertes y les vamos a vencer, entre todos y todas.

Hoy me siento vasco, estoy triste por las familias que tienen esa sensación de pérdida y ya nada lo llenará. Pero desde este humilde rincón quiero que sepan que estamos con ellas y que tendremos una deuda de gratitud eterna con quienes se han ido.

ETA NO – ETA EZ

Orgulloso de ser Friki

Se acerca el 25 de mayo y desde hace algunos años, gracias al esfuerzo personal de un friki de verdad (de 33717friki giocondaverdad porque ha ido más allá de lo que un friki ha ido jamás), celebramos el Día del Orgullo Friki.

Tal «appreciation Day» (como diría un norteamericano) se debe a la idea que el Señor Buebo (el friki en cuestión) tuvo para hacer un día en el que los frikis, otrora despreciados, hoy de moda, tuviéramos un día de celebración donde poder exhibirnos sin pudor (aunque esto para un friki de verdad es una redundancia).

En fin, no sólo se trata de que quedemos y veamos películas, leamos cómics, escuchemos música, exhibamos nuestras colecciones, roleemos un rato, juguemos en la consola, hagamos cosplay, nos disfracemos de extraterrestre, etc. Se trata de que los que tienen alma friki y no lo explicitan, se atrevan a «Salir del Blister». Sí, como lo estás leyendo amigo/a lector/a. Si los gays salen del armario, los frikis que no quieren admitirlo hay que hacerles salir del blister. [Nota aclaratoria: el blister, es ese dichoso plastiquito que se niega a abrirse o es imposible abrirlo, para disfrutar de nuestro ansiado gadget; claro que cabe una opción peor, más friki: que no rompamos el blister, conservemos el gadget dentro hasta el fin de los tiempos, por aquello del valor añadido de nuestro oscuro objeto del deseo en el futuro. Si no eres friki no lo vas a comprender, no malgastes el tiempo en ello, ¡ah!, y por supuesto descarta ya lo de ser friki]

Bueno, llegado a este punto aparte de recomendaros una visita por la página del Señor Buebo para que estés al día de lo que se cuece en el mundo hispanofriki, hay una cosa que quiero compartir con vosotros/as y que creo que ayudará a comprendernos un poco más. El friki nombrado ya, es tan prolífico que ha escrito un libro muy divertido llamado «Orgulloso de Ser Friki«, que recomiendo para tres grupos potenciales: a) Los frikis (te lo vas a pasar de miedo, es más creerás que están hablando de tí), b) las parejas de los frikis, nos comprenderán mejor, y c) aquellos/as que pretendan salir del blister y les ayude a comprender lo que son, para que abandonen el Reverso Tenebroso de la Cotidianidad Diaria y se acerquen a nuestro universo paralelo, el universo en el que aceptamos ser como somos y que disfrutamos siendo como somos (estoy seguro que os hará ver brillar la Puerta de Tanhausser).

Así que sin más dilación os voy a relatar el gran secreto friki, conservado como una biblia oral de generación en generación en un lenguaje, que el élfico en comparación resulta más simple que el ABC.

Se trata del Código Friki de nuestros Derechos y Deberes (no es muy largo, son dos Decálogos)

Derechos In-Alien-Ables del Friki:

  1. Derecho a Ser más Friki
  2. Derecho a quedarse en Casa
  3. Derecho a no tener pareja y ser virgen hasta la edad que sea. Si se tiene intentar su conversión
  4. Derecho a no Gustarnos ni el Fútbol ni el deporte en general
  5. Derecho a la Asociación Friki
  6. Derecho a tener pocos amigos (o ninguno). Derecho a tener todos los amigos frikis que se quieran
  7. Derecho a no Ir a la Moda
  8. Derecho al Sobrepeso y a la Miopía
  9. Derecho a exhibir el propio Frikismo
  10. Derecho a Dominar el Mundodia_del_orgullo_friki_forges

Obligaciones del Friki (de obligado cumplimiento)

  1. Ser Friki, pese a todo
  2. Intentar ser más Friki que otro Friki
  3. Si hay alguna discusión sobre algún tema friki, entrar a dar opinión
  4. Salvaguardar todo el material friki de personas desaconsejables
  5. Hacer todo lo posible por exponer el material friki
  6. No ser Friki de todo. Hay que estar especializado en algo
  7. Ir al estreno de cualquier película friki, comprar antes que nadie un libro o un DVD friki
  8. Esperar la cola ante un estreno friki y si es disfrazado, mejor
  9. No desprenderse nunca de nada relativo al mundo friki
  10. Intentar dominar el mundo

Este es el resumen de una vida dedicada al frikismo. Quiero hacer una anotación por si el artículo 10 de ambos decálogos os ha producido desazón. Los frikis sabemos que más tarde o más temprano (la intuición me dice que será más tarde de lo esperado) dominaremos el mundo. Eso sí, no sabemos exactamente que mundo será el afortunado (Hay muchos pero están en este, decía Eluard), pero somos pacientes…

Espero que este post os haya ayudado a comprendernos un poquito más. Eso sí, si el día 25 os damos la oportunidad (aunque sea tangencial) de acercaros al universo friki, dádle por lo menos una oportunidad, no seréis el primer friki que ha descubierto su sentido de la vida en una vocación tardía, al universo trek, al wary, al cómic, al cine italiano de terror de los 70 (Giallo, para los expertos) o yo que sé.

Os animo a descubrir ese lado, o a explorarlo, o simplemente a adoptar a un friki en vuestras vidas, os aseguro que serán más animadas, aunque sea por lo cargantes que llegamos a ser.

Os deseo una Larga y Próspera Vida (sí, es que soy friki y trekkie, o sea que tengo pedigrí, tú verás la que voy a liar con esto último)

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